Una sentencia obliga a que todos los vecinos paguen la adaptación a la TDT

Una propietaria intentaba evitar pagar los cien euros de derrama alegando que ella no vería la tele, una hipótesis que el juez no cree El 3 de abril de 2010 ya no habrá televisión analógica en la ciudad
Ningún vecino se puede escaquear de pagar la derrama que imponga la adaptación a la nueva televisión digital terrestre (TDT). La tele es un bien de primerísima necesidad hoy día y la Justicia no se cree que el propietario de una vivienda pueda excusarse en que no verá la tele. Sobre todo si detrás existe la intención de dejar de pagar la parte correspondiente para adaptar la ya vieja antena analógica a la nueva que recoge la señal de la TDT.
Así se desprende al menos de la sentencia número 77/09 de la Audiencia Provincial de Badajoz, motivada porque en uno de los bloques de viviendas de la travesía Felipe Trigo -edificio Zarza- donde viven 12 vecinos, una propietaria se negaba a pagar los cien euros que sí aportaron los demás.
En principio se le dio la razón, pero en el recurso que interpuso el resto de la comunidad el juez estimó que, si bien es cierto que la Ley de Propiedad Horizontal indica que estos servicios o infraestructuras no pueden ser impuestos (y por tanto su coste tampoco) a los comuneros sin su voluntad, la TDT afecta directamente al concepto de «habitabilidad» y «funcionalidad» del edificio.
Los fundamentos jurídicos del fallo apelan también al «siempre sabio Código Civil, que establece que las normas jurídicas serán interpretadas teniendo en cuenta la realidad social del tiempo en que han de ser aplicadas».
Como afirma la parte apelante, representada por el abogado Francisco Luengo Castaño, y que se recoge en la sentencia, «en la sociedad de la información y el conocimiento, el entorno digital se está convirtiendo en una condición necesaria de funcionalidad y habitabilidad de los inmuebles, no en algo suntuario o de lo cual se pueda prescindir», por lo que considera que la antena de la TDT no es una obra «de lujo o simple mejora sino obra necesaria» que afectaría a la funcionalidad del edificio.
Para cerrar el círculo del razonamiento el juez fundamenta su sentencia en que «cuando se produzca el apagón digital en 2010, el comunero disidente -que en un principio se negaba a pagar los cien euros de derrama- tendrá dos opciones: o quedarse sin televisión (hipótesis no creíble) o acceder a los servicios de la TDT, para lo cual adquirirá un receptor de TV digital o el correspondiente adaptador, gasto que deberán afrontar, antes o después, todos los comuneros del inmueble. Pero lo cierto es que, necesariamente, el apelado se aprovechará, pues no cabe otra solución, de la nueva infraestructura de la TDT» (sic).
Antenización progresiva
Al margen de la sentencia judicial, no hay que olvidar que quedan exactamente 344 días (3 de abril de 2010) para que la ciudad de Badajoz sufra el apagón analógico, según recuerda la página oficial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que informa sobre la televisión digital terrestre (TDT).
Otras capitales y municipios manejan plazos distintos más apremiantes, como el sur de la provincia, concretamente el entorno de Fregenal de la Sierra, donde en 66 días dejará de verse la televisión analógica y aún hay deficiencias para recibir la TDT a través de nuevos reemisores, una infraestructura en la que está trabajando la Junta de Extremadura junto a empresas privadas.
Ante la inminencia del apagón analógico, la variedad de canales que oferta la TDT y la mayor calidad de su imagen, apenas quedan comunidades de vecinos cuya administración está profesionalizada que no hayan adaptado su nueva antena comunitaria, un trámite que suele aprobarse por unanimidad en las juntas de propietarios, según confirman todos los administradores de fincas consultados, como María del Carmen Expósito, que ante la demanda de sus administrados ha optado por pactar un precio estándar de 450 euros con una empresa autorizada salvo que haya que incorporar un mástil o torreta «y así no tengo que estar pidiendo un presupuesto tras otro cada vez que una comunidad me pide hacer el cambio. En unos casos el antenista dice que ganará más dinero y en otros menos, pero es más cómodo». Según cuenta, «las comunidades más pudientes ya se han ido adaptando y en las más humildes están esperando al último momento. «Con menos vecinos sale más caro y, en cualquier caso, hace dos años era mucho más barato», añade.
Otro administrador, Francisco José García Vidal, asegura que más del 95% de las comunidades que él tiene en cartera ya están ‘antenizados’, en parte gracias al Mundial de Fútbol de Alemania que emitió La Sexta en 2006 y a que es un punto del orden del día fácil de sacar adelante, «porque cuando más del 60% de los vecinos -salvo impugnación judicial- está de acuerdo la decisión se ejecuta».
Además de los factores referidos para incorporarse a la TDT, María Jesús Santos, que gestiona varias fincas urbanas en la ciudad, apunta que «la televisión analógica de toda la vida está fallando mucho últimamente y esto incita a los propietarios a pedir presupuestos sobre la TDT, ya que está ocurriendo, sobre todo en los pisos más bajos, que la señal analógica llega con poca calidad, así que cuando llega el antenista él mismo propone la adaptación a la TDT. En mi caso ya han dado el paso el 99% de las comunidades que gestiono».
Juan José Nieto, presidente de la Asociación de Instaladores de Telecomunicaciones de Extremadura, advierte sin embargo que aún queda tarea por hacer. «Me refiero a aquellas comunidades de vecinos que no tienen delegada su administración en un profesional y a los particulares que viven en viviendas unifamiliares». Respecto a la baja calidad de la señal de algunas antenas analógicas, «esto se debe -dice- a que la antenas no se suelen mantener y sólo cuando terminan averiándose la gente se acuerda dela TDT».
Por otro lado, advierte de que, por culpa de la crisis, el intrusismo está aumentando en su sector, «por eso lo mejor es pedir el número de homologación al solicitar el presupuesto» Lleva más de treinta años en la profesión y tiene el número 6170 en la dirección general de Telecomunicaciones.
– ¿Qué tal se capta la televisión digital en Badajoz?
– En general, bien. Tenemos un repetidor local en La Luneta y el principal, Montánchez, por lo que hay dos orientaciones posibles.
– ¿Y cuál es la mejor?
– Depende de la zona. Habría que orientar a la Luneta en toda la margen derecha y la zona entre el río y San Juan, incluida Santa Marina. El resto hacia Montánchez. San Roque se alimenta de las dos. La zona más conflictiva y que da más problemas es María Auxiliadora, sobre todo en los bloques bajos que están detrás de los de ocho nueve plantas junto a la antigua N-V. Con mástil o una torreta s e puede solucionar, pero tiene un coste, claro.
– ¿La mayor parte de vuestro trabajo está ahora mismo relacionado con la TDT?.
– No, esto es una parte más. Atendemos averías y también las ICT (Infraestructura Común de Televisión) en edificios nuevos.
– ¿En qué porcentaje diría usted que Badajoz está ‘antenizado’ de cara a la TDT?
– Es aventurado decirlo, pero calculo que en un 70%.
– El 3 de abril de 2010 llega a Badajoz el apagón analógico, ¿esperará mucha gente hasta ese día?
– Me temo que sí y habrá problemas.
– ¿Qué debe tener en cuenta un particular o una comunidad de vecinos para adaptarse a la TDT?
– Si el bloque es nuevo ya la traerá. Pero si es individual, por ejemplo un chalé, debe ser una antena actual de 21-69, que es el margen de canales en el que trabaja.
– ¿Hay mucho intruso en su sector?
– Demasiados. Compran la antena en cualquier sitio, la ponen, la cobran y se van. Si algún canal no entra bien, al cliente le dicen que es cuestión de un momento por culpa del repetidor, cuando no es así.
– ¿Una antena vieja vale para la TDT?
– Valer vale, pero es que una bandeja nueva vale de media 50 euros. vienen mejor preparadas y no tienen óxido. Además, conviene cambiar el cableado, que vale 60 céntimos el metro y su vida útil alcanza unos diez años. A partir de entonces pierde propiedades.
– ¿Cuál sería el presupuesto medio para una comunidad de unos veinte vecinos?
– No hay dos comunidades iguales y la antigüedad influye mucho, pero diría que entre 500 y 900 euros. Incluye módulos, fuentes de alimentación y a lo mejor una bandeja. Lo mejor es estudiar tres o cuatro presupuestos.
– ¿Debe poner en la antena ‘recomendada para TDT’?
– Eso pasa porque las marcas comerciales tienen que vender, pero cualquier antena actual vale en general.
Fuente : Hoy.es
Claudio Hernández Diesl.com

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