Los receptores de IPTV cobran protagonismo
La IPTV (Televisión sobre protocolo IP, en inglés) está abriéndose paso rápidamente en todo el mundo. El incremento de la velocidad en las líneas de banda ancha está permitiendo que cada vez sean más los canales que, bien integrados en alguna operadora de cable o de ADSL o bien de forma independiente, ofrezcan sus servicios de televisión a través de Internet directamente al usuario. Y ese aumento de la oferta ha hecho crecer, como era de esperar, el mercado de los receptores de IPTV.
El sector ha sabido responder a la tendencia y las necesidades de los consumidores, que apuestan por reunir en un único equipo las máximas prestaciones posibles. Así, es habitual encontrar en el mercado receptores IPTV que disponen también de sintonizadores adicionales de satélite o de TDT (o incluso ambos), que son capaces de recibir señal en alta definición (HD) y que cuentan con ranuras para tarjetas que permiten disfrutar también de televisión de acceso condicional o de pago.
La tecnología satelital y la terrestre llevan con nosotros más tiempo, de manera que la gente aún tiene que aprender a exprimir al máximo las opciones que ofrece la IPTV: contenidos a la carta, canales de pago y también abiertos, radio por Internet servicios como Youtube o Dailymotion en el televisor, acceso a las principales redes sociales, contenidos específicamente dirigidos al público adulto, una enorme capacidad para actuar como reproductor multimedia de archivos locales (vídeo, audio, música) tanto en red como en dispositivos externos…
El abanico es muy amplio, tanto que podemos concluir que los receptores IPTV ayudan -a través de su conexión a la red- a hacer de los televisores el verdadero centro neurálgico del entretenimiento en el hogar. Sin olvidar que este tipo de tecnología permite recibir las emisiones en todo tipo de dispositivos móviles, como smartphones o tablets, algo que los canales están potenciando como vía para interacturar con su audiencia.