Adiós a la tele de siempre
En un país en el que cada ciudadano dedica cuatro horas diarias (235 minutos para ser exactos) a ver televisión, no cuesta demasiado calibrar la trascendencia que lleva implícita cualquier medida relacionada con el medio audiovisual. Más aún si el cambio consiste en un relevo de fondo, la sustitución de un sistema tecnológico por otro….